Y no hace falta poder volar para sentirnos mágicos.
Yo sueño, tú sueñas, ¿qué más necesitamos?
Que pase el tiempo rápido,
que venga finales de junio,
y julio,
y agosto,
y septiembre,
que venga el calor y que se vuelva a ir,
que venga el frío, las tardes de lluvia y que me pille en casa,
que vengas tú y me pilles despierta.
El asomarme a la ventana y escribir cuatro lineas,
Que venga la musa y me obligue a levantarme para escuchar sus lamentos.
Que vengan los supiros,
los llantos y los berrinches,
las sonrisas y los gritos de pura euforia,
las lunas llenas,
que vengan las noches que se me hacen segundos
y los minutos que se me hacen años bisiestos.
Que venga la incertidumbre
y los besos de buenas noches.
Que pase el tiempo rápido,
que venga finales de junio,
y julio,
y agosto,
y septiembre,
que venga el calor y que se vuelva a ir,
que venga el frío, las tardes de lluvia y que me pille en casa,
que vengas tú y me pilles despierta.
El asomarme a la ventana y escribir cuatro lineas,
Que venga la musa y me obligue a levantarme para escuchar sus lamentos.
Que vengan los supiros,
los llantos y los berrinches,
las sonrisas y los gritos de pura euforia,
las lunas llenas,
que vengan las noches que se me hacen segundos
y los minutos que se me hacen años bisiestos.
Que venga la incertidumbre
y los besos de buenas noches.