lunes, 23 de marzo de 2009

Algo nuevo, efímero.


Duerme, pequeña,
que lo bueno se te escapa
entre los deditos de los pies,
viendo como pasa otro amanecer
y otro y otro y otro más,
en sueños, no realidades.
Perdiendo miradas que petrifican,
o besos robados,
o una simple canción que hace que el vello se te erice.
Efímero, pero crónico.
Es lo que espera asomada a su balcón,
observando desde un nivel superior,
no por ello mejor, sino desde distinta perspectiva.
Crónico para rellenar esa sucia libreta
que lleva años tirada bajo la cama que,
cansada de escribir una o dos líneas a lápiz,
prefirió no dejar constancia
porque no merecía la pena
recordar aquello que no fue significativo.

Efímero, pero crónico.
Enfermizo, duradero, fugaz y real,
no como pueda pintarlo una película,
como ella quiere sentirlo:
con el color de un atardecer en invierno,
con olor a libretas nuevas y
textura de mar.
Sólo pide eso.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Lo pido =). Para mí.

Te quiero enfermizo

Nalen dijo...

Lo tendrás, ansioso. Que eres vago hasta pa loguearte xD